1. Dar nada por sentado: El ciudadano, y la profesión bien entendida, espera de ti que te preguntes el porqué de las cosas. Que investigues, que corrobores tu información, que la nutras de distintas fuentes, que congregues en ella a todas las partes implicadas, que escuches sus versiones sin fiarte a pies puntillas de ninguna de ellas. En definitiva, que busques la verdad.
2. Confiarte de la fuente oficial: Nunca te fíes de la fuente oficial. Sea quien sea, es una fuente interesada y acude a ti con un determinado fin. Escudriña las notas de prensa y sé capaz de averiguar qué quieren decir en realidad y porqué. Aunque las fuentes oficiales, con sus comunicados y notas de prensa nos hagan más ágil y rápido nuestro trabajo, si nos dedicamos a replicar sus palabras no seremos periodistas, sólo meros portavoces.
3. Aceptar las ruedas de prensas sin preguntas: Esta es la eterna lucha de los periodistas. Cada vez que alguna institución que nos convoca a una rueda de prensa, nos quita nuestra posibilidad de preguntar, está denigrando nuestra profesión y algo más: el derecho de un pueblo democrático a ejercer su libertad de prensa. No lo podemos permitir.
4. No empatizar con tu audiencia: Como dirían los anglosajones “ponte en sus zapatos”. El periodista, siempre, ha de estar del lado del ciudadano. Desde esta posición, crearás noticias más frescas y más interesantes para la audiencia. Muchas veces somos sus portavoces, los encargados de hacer que su voz se oiga. Para ello y fundamental, sal de la redacción y pisa la calle. Simplemente habla con ellos.
5. Eludir las nuevas tecnologías: Nuestra profesión está cambiando, eso ya nadie lo duda. Internet y las redes sociales nos han traído nuevas formas de comunicar y concebir audiencias y medios. Las tenemos que adaptar a nuestro trabajo.
6. Resistirte al cambio: En concordancia con el punto anterior, negar la evidencia no sirve de nada. Los periodistas somos supervivientes natos, seres que nos sabemos adaptar a todas las situaciones y resurgir con fuerza ante las adversidades. Nadie viene a robarnos el puesto con las nuevas tecnologías, simplemente las cosas están cambiando.
7. Permitir que te fijen las preguntas antes de ir a una entrevista: Si van a hacer esto, directamente, que te manden una nota de prensa. Con esta acción, una vez más, menosprecian tu trabajo pero, a la vez, vuelven a vulnerar uno de los derechos fundamentales de la población: la libertad de expresión y el derecho a la libertad de prensa.
8. Perder tu sentido crítico: El día que te dejes de preguntar el porqué de las cosas, deja de ser periodista.
9. Ser parcial: Si vas a vender tus palabras a una determinada fuente, deja el periodismo libre y trabaja en el Gabinete de Prensa de la fuente en cuestión. No busques caer bien a nadie, sólo ejercer bien tu trabajo.
10. Pensar que todo vale por una noticia: Nunca olvides que, antes de periodista, eres persona. Con todo lo que eso conlleva.
2. Confiarte de la fuente oficial: Nunca te fíes de la fuente oficial. Sea quien sea, es una fuente interesada y acude a ti con un determinado fin. Escudriña las notas de prensa y sé capaz de averiguar qué quieren decir en realidad y porqué. Aunque las fuentes oficiales, con sus comunicados y notas de prensa nos hagan más ágil y rápido nuestro trabajo, si nos dedicamos a replicar sus palabras no seremos periodistas, sólo meros portavoces.
3. Aceptar las ruedas de prensas sin preguntas: Esta es la eterna lucha de los periodistas. Cada vez que alguna institución que nos convoca a una rueda de prensa, nos quita nuestra posibilidad de preguntar, está denigrando nuestra profesión y algo más: el derecho de un pueblo democrático a ejercer su libertad de prensa. No lo podemos permitir.
5. Eludir las nuevas tecnologías: Nuestra profesión está cambiando, eso ya nadie lo duda. Internet y las redes sociales nos han traído nuevas formas de comunicar y concebir audiencias y medios. Las tenemos que adaptar a nuestro trabajo.
6. Resistirte al cambio: En concordancia con el punto anterior, negar la evidencia no sirve de nada. Los periodistas somos supervivientes natos, seres que nos sabemos adaptar a todas las situaciones y resurgir con fuerza ante las adversidades. Nadie viene a robarnos el puesto con las nuevas tecnologías, simplemente las cosas están cambiando.
7. Permitir que te fijen las preguntas antes de ir a una entrevista: Si van a hacer esto, directamente, que te manden una nota de prensa. Con esta acción, una vez más, menosprecian tu trabajo pero, a la vez, vuelven a vulnerar uno de los derechos fundamentales de la población: la libertad de expresión y el derecho a la libertad de prensa.
8. Perder tu sentido crítico: El día que te dejes de preguntar el porqué de las cosas, deja de ser periodista.
9. Ser parcial: Si vas a vender tus palabras a una determinada fuente, deja el periodismo libre y trabaja en el Gabinete de Prensa de la fuente en cuestión. No busques caer bien a nadie, sólo ejercer bien tu trabajo.
Tomado de Mundo 2.0 y Periodismo 2.0
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ResponderEliminarTengo estos consejos clasificados en tres partes:
ResponderEliminar1. Como decía un buen profesor, no hagas lo que te piden, da más de lo que tienes.
2. Dejarse comprar por dominación, por beneficios o por miedo a hacerte sentir.
3. Ser llevado por lo corriente y no buscar como un ser escéptico. Todo esto hace parte de un mediocre sin ningún síntoma de ser periodista.
Sin Palabras Abelardo, Excelentes los tips que nos da en el día a día para llegar a ser mejores periodistas.
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